Si no te van las bodas demasiado solemnes o simplemente prefieres actuar en esa situación con naturalidad y sin tener que cumplir un protocolo o vestir de una forma predeterminada porque así lo marca el guión: bienvenida, novia hippie.
Dentro del estilo hippie, al que asociamos con el movimiento de los años 60 que recibió este nombre, podemos encontrar una gran variedad, y es que la influencia de la ropa y los ideales de aquella época en la que el lema era “haz el amor y no la guerra”, ha ido poco a poco ramificándose y evolucionando con el paso de los años, por lo que hoy en día lo que tenemos son algunas pinceladas de aquello dentro de otros muchos estilos.
Muchas parejas jóvenes que deciden casarse no desean en absoluto tener que dejar de ser ellos mismos y estar en un ambiente que les es ajeno o que no va con sus principios.
La ropa que vestimos el día de nuestra boda dice mucho de quienes la llevamos, de nuestra forma de ser, de nuestros gustos y de nuestra filosofía de vida.
Si deseas contraer matrimonio en un espacio campestre o en una ceremonia sencilla, poco recargada pero llena de identidad propia, seguro que los vestidos de novia hippie te encandilarán. Están llenos de simbolismo, ofrecen comodidad y a la vez con muy poco consiguen transmitir mucha delicadeza.
Descubre algunos de ellos en los siguientes apartados y encuentra las ideas que más te interesan para tu vestido de boda perfecto.
“Hippie-chic” y “boho-chic” son algunos de los términos que se han acuñado en los últimos tiempos para enmarcar una serie de tendencias, y no sólo en la moda, también en decoración.
Los vestidos de novia hippie-chic cumplen varias características: la primera, y de la que viene su nombre es que tienen un toque bohemio, es decir, natural, pero también muy femenino y evocador.
Para reforzar el aire romántico que se quiere conseguir se usan tejidos superpuestos: encajes, tules o sedas que le dan vaporosidad y ligereza a la pieza final.
En definitiva, un vestido de novia hippie chic podría considerarse como una fusión entre modernidad, gracias a la naturalidad, los aires frescos y desenfadados que da el estilo hippie, y la vuelta a lo vintage que ofrecen esos tejidos de encajes tan delicados.
Como nota para completar el look bohemio, no deben faltar las flores: en tu pelo, en tu vestido o en tu ramo de novia y los peinados con el pelo suelto o con un recogido despeinado con algunos mechones cuidadosamente dejados caer por los laterales del rostro.
La isla de Ibiza es conocida por sus fiestas, sí, porque allá donde mires hay fiesta, baile y diversión las 24 horas del día, pero Ibiza tiene dos caras muy diferentes. Una es esa de la que acabamos de hablar, la otra es la que evoca tranquilidad, sosiego, una vida sin complicaciones y la belleza de su mar Mediterráneo, que se puede admirar desde cualquiera de las blancas casas típicas de la zona.
Esa otra cara es la que inspira a los vestidos de novia que se enmarcan dentro de la moda adlib, donde el color blanco es el protagonista.
El color blanco y los tejidos y materiales que provienen de la naturaleza: algodón, guipur, lino, y los detalles únicos con esas mismas composiciones: cenefas y flores en ganchillo, velos de estilo pirata con bordados, diademas de nuevo en crochet…
Son los trajes que mejor combinan con una ceremonia al aire libre, en la playa o en un ambiente bucólico.
Deja de lado la pandereta, y quédate con todo lo demás: falda con abertura o con capas de ondas y volantes, abalorios varios, como pasamanería con borlas y pompones o una vistosa diadema de tipo corona adornada por piezas metálicas que simulan monedas.
No hay que olvidar tampoco unos maravillosos flecos que den movimiento a las mangas o a la falda o acompañar el vestido con un chal de encaje y flecos en ganchillo del mismo color y estilo para las bodas en otoño o invierno.
Entre los vestidos de novia hippies también pueden encontrarse modelos en los que no hay rastro de encajes ni bordados y que siguen siendo preciosos.
A veces la sencillez es la que más destaca y es el caso de los vestidos que toman prestadas algunas características de los trajes de novia de estilo griego: sin mangas, con anchos tirantes y escote en V y confeccionados con gasa, para que tengan una estupenda caída y sienten como un guante.
Otra propuesta que se aproxima más a las modas de los años 60 son los vestidos sin mangas, que dejan los hombros al descubierto y llevan un gran volante a la altura del pecho y que continúa en la espalda, ideales para una boda civil campestre en la que queremos fundirnos con la naturaleza.
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